You're going to have to teach me to wipe my 🍑 myself: A love letter.
Reflecting on that time my husband had to clean my * approximately 262 times.
ENGLISH BELOW! (past the paywall sorry)
Dado a que muchos de mis nuevos suscriptores están aquí en México, aquí va mi primer post en español. Disculpenme los errores plis. Gracias por estar.
⚠️ Ahora una advertencia: este post es altamente asqueroso tanto por caca como por amor cursi, muy cursi, pero del bueno. ⚠️
Quién me conozca sabe que tengo la boca muy sucia tipo pipi-caca. Y fue por eso que cuando le dije a mi abuela el año pasado que me habían hecho una cirugía de emergencia de reconstrucción de mi recto y ano me respondió: “es algo que harías.”
Aquí te va una de las cosas más ridículas que me ha pasado: esa cirugía requirió que alguien me limpiara el ano con hisopos y aplicará dos medicinas varias veces por día durante meses. El número de veces dependía de cuántas veces cagaba, y solía ser muchos porque me recetaron mucho Contumax (un nombre que por cierto me da mucha risa) para dejar sanar a mi recto.
Una de las cosas más conmovedoras que me ha pasado: mi valiente esposo, Dayron, se prestó para eso con una dedicación increíble. Tengo cero idea de lo que habría hecho sin él.
Aquí algo también asqueroso pero no de caca: esa cirugía también me dejó con un hoyo en la nalga lo cual fue demasiado grande como para cerrar con puntos. Cuando salí de la cirugía y Dayron vio el hoyo, sus ojos enormes se hicieron más enormes y se llenaron de lágrimas. Me asusté y le pregunté, ¿¡Qué tan grande es?! Y me respondió, llorando, “Pues, si enrollara un taco, se lo podría meter.” Dayron pasó los siguientes meses limpiando esa herida junto a mi ano.
Dos meses después de la cirugía, tuve que viajar para el trabajo—sola. Mi doctor dijo que mi ano estaría bien unos días, pero que iba a tener que aprender a limpiar la herida yo. Y ya tienes el contexto de esta carta de amor.
Aquí te va.
Dayron,
Jamás olvidaré del momento en el Uber en que te dije, “Me voy el viernes a Nueva York. Me vas a tener que enseñar a limpiar la cola yo solita.” Y me contestaste, “Si, claro, mi amor”. Y el chofer se volteó a vernos con una cara de total confusión y asco.
Keep reading with a 7-day free trial
Subscribe to How to Have Fun in the Apocalypse to keep reading this post and get 7 days of free access to the full post archives.